Los asesinatos de jóvenes en «falsos positivos», como se conocen en Colombia los asesinatos de civiles a manos de militares, fueron parte de una política de Gobierno aplicada entre los años 2002 y 2008, y así será consignado en el informe que entregará la Comisión de la Verdad el próximo 28 de junio.
Así lo dijo Alejandro Valencia, miembro de la Comisión de la Verdad, en un acto en el que participaron familiares de jóvenes de Soacha, población aledaña a Bogotá, y un grupo de exmilitares que también han admitido su responsabilidad en esos hechos ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).