Más de 300 líderes de las regiones más afectadas por el conflicto, viajarán a Bogotá el 27 de julio para proponerle al gobierno del presidente Gustavo Petro y la vicepresidenta Francia Márquez una Agenda Humanitaria donde predomine el derecho a la vida con la implementación del Acuerdo de Paz y la reactivación de los diálogos con el ELN.
Durante décadas las voces de los líderes y lideresas han sido silenciadas por los fusiles y el terror. Ahora los territorios merecen ser escuchados. El sueño de acabar con la guerra es aún más fuerte en los territorios afectados por la violencia, su sufrimiento es el ejemplo de que la paz no solo hay que firmar si no construirla, por eso cada día tejen una nueva historia para que la paz se vuelva una realidad.
La situación humanitaria en Colombia es crítica, la guerra ha dejado 1.315 líderes sociales asesinados y 1.813 hechos de violencia en lo corrido de 2022, la población civil hace un llamado a la protección de la vida, la dignidad y los derechos humanos, a la protección de su vida,dignidad y derechos, por esa razón más de 120 organizaciones y diversos procesos humanitarios de Arauca, Buenaventura, Chocó, Cauca, Caribe, Catatumbo, Magdalena Medio, Córdoba, Nariño, Putumayo Caquetá han trabajado a través de una Coordinadora Humanitaria para articular las voces de los territorios y crear una Agenda Humanitaria Nacional que permita un escalamiento humanitario urgente, esta convergencia se dio desde abril de este año y estará activa hasta que la paz sea política de Estado.
¿Por qué Colombia necesita conocer sobre la Cumbre Humanitaria Nacional?
Porque para perderle el miedo a la guerra hay que trabajar por la paz y es lo que están haciendo cerca de 300 líderes, lideresas y diferentes organizaciones de los departamentos antes mencionados y necesitamos sumarle a esa cifra muchos más colombianos para que más juntos construyamos paz y que el derecho a la vida sea el punto de partida para lograr un verdadero cambio.